La cita era a las 7 de la tarde en la Fnac de Bilbao y yo, que soy un ingenuo, ya estaba allí unos veinte minutos antes de la hora prevista, temiendo no encontrar un sitio donde sentarme. Llegué, y no había ni una sola persona en las tres filas de sillas que habían preparado para el evento, así que elegí la que más me gustaba, la coloqué para poder estirar mis largas piernas sin molestar a nadie y esperé a que llegara la hora. Alis apareció puntual, y tras comprobar que apenas estábamos diez personas, puso la mejor de sus sonrisas y se metió en el almacen que utilizan como improvisado backstage, imagino que para hacer tiempo por si todavía llegaba algún rezagado. Volvió a aparecer, se subió al escenario y, muy simpático, nos contó que era un enamorado de Euskadi y que era la primera vez que iba a tocar en Bilbao. Me sorprendió muchísimo el gracioso acento andaluz que tiene, un acento que jamás le hubiera imaginado, y me llamaron muchísimo la atención las dos guitarras que lucía, una eléctrica y otra acústica que son de las más bonitas que jamás haya visto. Como imaginaba, Pachi vino sin banda, y sin más dilación se propuso a cantarnos la parte acústica de su último disco, Cuando el sol nos dé calambre, para, como dijo, tratar de convencernos para que nos lo comprásemos. La verdad es que después de lo mucho que me gustó el disco en las primeras escuchas, iba un poco escéptico al concierto, y es que las canciones, con el paso de las semanas, habían ido perdiendo grado y en conjunto no habían conseguido quedarse en mí como en un principio había imaginado. Alis arrancó con Liverpool, un tema que es una especie de tributo a los Beatles y lo mucho que le han influído en su vida. De letra algo fácil y simple, éste tema sirvió para comprobar que Pachi tiene una voz portentosa, elástica a más no poder. Alis es uno de esos artistas que canta con los ojos cerrados (quizá para no ver la poca gente que había), y esto, que para muchos puede resultar una tontería, es un detalle que a mí me encanta, me gusta verlos concentrados únicamente en lo que está saliendo de sus labios y manos. Siguió con La lluvia y el paraguas, un precioso tema en el que, a falta de músicos que le acompañaran, completó grabando una base con la acústica para después, por encima, hacer una serie de solos con la eléctrica en un bonito final. Continúo con Mínimo, un tema de su anterior disco, y éste fue para mí el mejor momento de la tarde, el más intenso. Alis desató la tormenta vocal que lleva dentro y arrancó los aplausos más fuertes de su corta actuación. Mínimo siempre ha sido una de mis canciones favoritas de su repertorio, y ayer, después de su soberbia interpretación, subió unos peldaños más en mi ránking personal. En cuanto escuché los primeros acordes de la siguiente canción me dije, ¡esta es la mía!, y es que detrás de esas caricias a las cuerdas se escondía Cine mudo, el single del disco y mi canción favorita sin duda, una de las que más he escuchado este año. Alis tocaba el principio pero no empezaba a cantar, y después de dos minutos de darle vueltas, soltó la guitarra y nos confesó que se había olvidado de la letra. Miraba a su mánager y éste no le daba respuesta, y después de comprobar que nadie de la sala estaba por la labor, le dije, con mi voz de chico tímido y nervioso ¿Buster Keaton?, y entonces sí, me dio las gracias y arrancó. En mi opinión, Cine mudo es un tema que pierde muchísimo en su versión acústica, y la verdad es que no me convenció mucho, es una pena que finalmente no diera por la noche el concierto con banda que tenía programado en un principio en la Sala Azkena, y es que creo que Alis tiene que lucir más en formato eléctrico. Se despidió con el tema que da nombre al disco, Cuando el sol nos dé calambre, y a mí se me quedó una extraña mecla de sabores en el paladar; fue un concierto agradable, tiene una voz extraordinaria y es un currante, pero como he dicho antes, creo que el formato acústico le perjudica, le ata, y le impide desarrollar las canciones como éstas merecen. Me hubiera encantado verle encima de un escenario de verdad con sus músicos pero, claro, si en un concierto que es gratuíto estamos menos de quince personas, ¿cómo se van a arriesgar a hacer un concierto en una sala?. El mundo de la música está mal, sí, pero los mayores culpables somos nosotros. Queda muy bonito decir eso de que la música cada vez es más cara, pero el problema es mucho más profundo, y es que me resulta triste y embarazoso para el artista ver conciertos como el de ayer. Alis es un tío honesto, que escribe, canta e incluso produce sus canciones, canciones de verdad, pero está visto que con es no es suficiente para atraer al público. En fin, ellos se lo pierden...
"Liverpool"
"La lluvia y el paraguas"
"Mínimo"
"Cine mudo"
"Cuando el sol nos dé calambre"
Nathaniel Said,
Se nos ha reblandecido Mikel. Ya nos quedan lejos los trallazos como 'Sigo aquí', 'Las flores sin jardín' o 'No me sueltes'. El tío canta como los ángeles, pero antes era más 'rock' y ahora se ha vuelto un poco 'popi'. Echo en falta el nervio de antes (y eso que el último disco en las primeras escuchas me cautivó, pero algunas canciones flojean). A ver si viene a Coruña el 13-J, porque estaba anunciado en su web, ahora no sale y en su myspace, tpco. Por cierto, buenos vídeos! Al nivel de Lupin Scorsese. :P
Un abrazo!
Posted on 22 de mayo de 2009, 14:21
Mikel Said,
Ey Nathaniel!
Pues si no aparece en el Myspace quizá lo haya cancelado, hace tiempo también ponía que tocaría en la Azkena y que yo sepa, nada de nada.
La verdad es que a mí me gustó bastante, pero como he dicho, con banda le tiene que sacar más jugo, seguro.
(no me compares con un genio audiovisual como Lupín, por favor) ;)
Posted on 23 de mayo de 2009, 0:44
Anónimo Said,
Estubo bien el concierto, me hubiera gustado verlo con su banda, y si en directo con la banda dicen que son buenisimos, espero verlos pronto por aqui. Segun tengo entendido van en algunas actuaciones con Amaral de grupo telonero.
Animo Alis.
Otra cosita, yo creo que estabamos sobre unas 35 personas, puesto que yo estaba en el bar tomando café y escuchado Alis y en otras ocasiones si es verdad, que solo estamos alli 10.
Vivan los amantes de la musica en directo.
Posted on 1 de junio de 2009, 15:56
Mikel Said,
Hola Anónimo!
35 personas? Lo siento, pero discrepo. Las estuve contando porque hacía tiempo que no veía tan poca gente...
A mí también me hubiera encantado verlo con la banda, canciones como "cine mudo" pierden en acústico...
¡Nos vemos en algún concierto, amigo!
Gracias por pasarte y comentar, un abrazote!
Posted on 2 de junio de 2009, 10:28